Síndrome del pinzamiento subracomial de hombro

Síndrome del pinzamiento subracomial de hombro

Hoy vamos a hablar del síndrome subacromial, impingement subacromial o tendinitis del manguito de los rotadores.

Este síndrome es la lesión más frecuente en el hombro y consiste en un estrechamiento del espacio subacromial (delimitado por arriba por el ligamento coracoacromial y la articulación acromioclavicular y por debajo por la cabeza del húmero), lo que provoca una inflamación del manguito de los rotadores a su paso por este «canal» y que son: supraespinoso, infraespinoso, redondo menor, subescapular y porción larga del biceps.

Ya va doliendo solo de leerlo… Bien , pues hasta aquí el recuerdo anatómico, pero qué es lo que pasa desde el punto de vista biomecánico: pues para resumir y no liaros demasiado lo que ocurre es que estos tendones tienden a descender la cabeza del húmero y así contrarrestar la gran tensión que el Deltoides (y algunos músculos más) ejercen ascendiendo la cabeza del húmero, es decir, la tensión de todos estos tendones y musculatura del hombro determina el posicionamiento de la cabeza del húmero y por tanto el espacio que queda entre ésta y la articulación acromioclavicular (el techo del canal que hablábamos antes), por lo que si la cabeza del humero se asciende el espacio subacromial disminuye, por lo que se produce este síndrome al quedar pinzados estos tendones.

La solución quirúrgica es sencilla, consiste en limar el acromion (el techo) y el canal se hace más grande y por tanto se quita el pinzamiento (aunque no olvidemos que estos tendones si siguen como estaban tenderán a ejercer las mismas líneas de fuerza y a la larga podrán de nuevo disminuir este espacio), pero después de entender la biomecánica, ¿no sería menos invasivo y duradero descender la cabeza del húmero sin tener que operar y así también será más duradero el efecto?, bien pues eso es lo que suele buscar la Fisioterapia en esos casos, trabajar la articulación del hombro en conjunto con todas sus subarticulaciones, musculatura, ligamentos, bolsas serosas, etc… para conseguir este objetivo. Por lo que solemos dejar la cirugía para cuando ya no hay solución fisioterapeútica como puede ser que algún tendón se haya roto.